Cada alma es diferente

Creo que todas las personas merecen ser escuchadas con oídos nuevos cada vez, porque cada persona ha vivido una historia, muy diferente una de otra.

Nuestra alma está llena de lo que hemos heredado, de nuestras circunstancias, de nuestras creencias, de sueños rotos, de ilusiones, de heridas y de continuas vivencias.

Creo que etiquetarnos en base a cualquiera de esas premisas es un error. 

Creo que pretender dar a todo el mundo una misma receta, en base a similitudes en sus experiencias es otro error.

Primero, porque nos podemos equivocar.

Segundo, porque estamos poniendo encima de una persona una etiqueta que la va a condicionar ya que esa persona se va a creer lo que dice esa etiqueta y por tanto, muy probablemente va a crear esas circunstancias de las que está siendo etiquetada.

Y tercero, porque una alma no debería poder catalogarse, por mucho que parezca necesario para tratar las circunstancias adversas de una persona.

Una alma es un corazón que necesita ser escuchad@, respetad@, valorad@. Para mí corazón y alma van de la mano y no es algo femenino ni masculino, simplemente somos un globo lleno de emociones y sentimientos, muchas veces reprimidos por miedo a que no nos acepten. 

No deberíamos clasificar a nadie porque con eso no se consigue nada, o bueno, quizás se consigue que las personas se sientan solas, porque de alguna forma se ha pretendido separarnos a través de etiquetas o diagnósticos y creo sinceramente que ese no es el camino correcto.

Nunca me gustó sentirme juzgada, por eso yo no lo hago. 

Solo quiero ayudarte y mostrarte la luz que hay en ti, para que sea ella la que te guíe en tu vida.